PRESENTACIÓN DE LA
REVISTA IMPRONTA No. 14
Palabras del Presidente
de la Academia Caldense de Historia
Estamos
aquí para socializar una edición más de la Revista Impronta de la Academia
Caldense de Historia: La edición No. 14, correspondiente al presente año 2016.
Podemos sentirnos satisfechos de completar catorce años, entregándole al
público culto de Caldas y de Colombia, de manera ininterrumpida, un documento
que representa la esencia de nuestra misión de conocer y difundir la historia
del Gran Caldas, y que llega a cada una de las bibliotecas de los municipios de
Caldas, a las Academias de las diferentes regiones del país y a las bibliotecas
de muchas universidades importantes de Colombia. Nos honramos de saber que
nuestra revista es leída por historiadores, profesores universitarios,
escritores, autoridades académicas y culturales, y por estudiantes de educación
básica, media y universitaria de toda nuestra geografía.
En esta ocasión, nuestra revista
destaca varios asuntos esenciales para la historia de la construcción de la
identidad caldense: De una parte, señalamos aquí que este ha sido un año de
importantes efemérides municipales: El Centenario del municipio de Risaralda,
la Colina del Viento, en el occidente caldense; la conmemoración de los 150
años de fundación del municipio de Pensilvania, en el oriente caldense; la
llegada del municipio de Salamina a sus 192 años de fundación y de su
Corregimiento de San Félix a los 158 años de existencia; la conmemoración de
los 156 años del municipio de Chinchiná; la conmemoración de los 92 años de
vida municipal de Marquetalia y el arribo del municipio de San José a su
mayoría de edad. Y también la conmemoración del primer centenario de la Revista
Archivo Historial, dirigida en Manizales por el historiador santandereano,
Enrique Otero D’Costa. Cada uno de estos acontecimientos está reseñado aquí con
sesudos artículos escritos por los miembros de la Academia y con amplias
noticias tomadas de la prensa regional. Esto nos permite posar no sólo como
testigos de esa ya madura historia de la gestación de nuestras identidades,
sino también, como garantes de que el olvido no podrá enseñorearse ya más de
las gestas más trascendentales de nuestro devenir.
De otra parte, la Revista Impronta
socializa con sus lectores, los acontecimientos de la vida institucional de la
Academia Caldense de Historia, acoge con generosidad las reseñas biográficas y
bibliográficas de los académicos que se han honrado este año con nuevas
publicaciones y amplía el repertorio biográfico y bibliográfico de los autores
caldenses que cada día van creciendo en número, reflejando la vocación
intelectual de esta bella parcela de Colombia.
Muchas gracias al Gobierno
Departamental, que este año se inició en cabeza del Doctor Guido Echeverri
Piedrahita y que en estos momentos dirige el Dr. Ricardo Gómez Giraldo. Es por
ellos y en particular por el decidido apoyo del Doctor Lindon Alberto
Chavarriaga Montoya, Secretario de Cultura del Departamento, que ha sido posible
financiar la edición de esta Revista. También agradecemos a la Dra. María
Clemencia Tamayo, funcionaria interventora de la Secretaría de Cultura de
Caldas, por su diligente gestión en procura de darle celeridad y transparencia
al proceso contractual a través del cual se arbitra el recurso presupuestal
para esta edición. Tenemos que agradecer también y en general a todos los
funcionarios de la Secretaría de Cultura de Caldas, pues nos siguen acogiendo
con amable generosidad en este bello escenario, tan propicio a la contemplación
del pasado.
Quiero reconocer aquí públicamente
mi gratitud y mi admiración por la labor desplegada por el Director de la
Revista, académico Fabio Vélez Correa. Soy testigo de que durante todo el año,
día tras día, el señor Vélez Correa se entrega con pasión y espíritu de
responsabilidad, a hilvanar y editar los artículos enviados por los académicos,
y a auscultar en cuanta publicación se dé a conocer en la región, en torno al
quehacer cultural de los caldenses, para alimentar la edición de esta revista,
con el ánimo de convertirla, como en efecto lo ha logrado, en el depósito
totalizador de la historia del Gran Caldas, de tal manera que no dudamos en
afirmar que hoy por hoy, quien desee conocer de la manera más detallada posible
cada una de las áreas de nuestro devenir histórico, tendrá que remitirse
forzadamente a la consulta de las páginas de ésta, para nosotros, honrosa
publicación.
Así mismo es oportuno reconocer con
gratitud la generosidad del grupo editorial Manigraf, donde se vienen
imprimiendo todas nuestras ediciones de Impronta. Manigraf es sencillamente
nuestra segunda casa, después de la Secretaría de Cultura del Departamento.
Todo el equipo directivo, técnico operativo y administrativo de esta amable
empresa editorial, merece nuestros aplausos, por la cálida acogida que nos
brindan durante todo los días del año, para ir construyendo en equipo, con
ambiente de hogar, el diseño e impresión de este órgano de divulgación que
representa a nuestra Academia.
No creo incurrir en un fuera de
lugar si aprovecho también esta oportunidad para expresar, en nombre de la
Academia Caldense de Historia, nuestra admiración y gratitud con los Alcaldes
que se han atrevido con entusiasmo y decisión a apostarle a la cultura de los
caldenses, promoviendo y apoyando la edición de textos, cuyos autores, siendo
miembros de nuestra institución, han hecho esfuerzos significativos para
producir nuevos aportes a la historiografía de los municipios y han contado con
el invaluable apoyo de los burgomaestres. Alcaldes como el de Filadelfia, Señor
Germán Zuluaga Duque, el de Risaralda, Señor Juan Camilo Gallego Hoyos y el de
Supía, Señor Omairo Ayala Cataño, han dado ejemplo este año, contribuyendo con
su decidida voluntad a generar una cultura de la administración pública,
propicia a los nobles y gratos menesteres de la gestión cultural.
Y cómo no felicitar y agradecer a
cada uno de los académicos autores de los diferentes artículos publicados en la
revista, por su señalado empeño en entregarnos textos de exquisita calidad
literaria e historiográfica, con sus aportes investigativos sobre el pretérito
de esta inigualable comarca.
No me queda por el momento, sino
sugerir con comedido respeto a los dirigentes sociales de nuestra región, a
sacarle mucho provecho a la revista Impronta. El Gobernador, los diputados, los
Alcaldes de los 27 municipios, los secretarios de Educación del Departamento y
de los municipios, los Rectores de las Universidades, los Rectores de los
Colegios, los Coordinadores de las Escuelas, los bibliotecarios, los profesores
de las distintas áreas del plan de estudios, harían una excelente labor
promocionando la lectura, el análisis y la consulta de los diferentes artículos
que se publican en esta revista.
Con estas palabras, hago entrega
pública de la Revista Impronta No. 14, de la Academia Caldense de Historia.
Gracias.
Ángel Ma. Ocampo Cardona
Octubre 14 de 2016.
Palabras del Director de la Revista Impronta
IMPRONTA, AL
RESCATE DE NUESTRO PASADO HISTÓRICO
El presente año, 2016, es un año clave en la historia
de Risaralda, la Colina del Viento, y lo es porque fue en 1916, cien años
atrás, cuando la Asamblea Departamental de Caldas, mediante Ordenanza Número
17, firmada por su Presidente, Marcelino Arango y el Secretario, Rafael Mª
Botero y aprobada por el Gobernador José Ignacio Villegas y el Secretario de
Gobierno, José María Arango G., le dieron a San Joaquín, el Corregimiento de
Anserma, el rango de Municipio caldense.
Asimismo, el 3 de Febrero de 1866, el gobernador del Estado Soberano de
Antioquia, Pedro Justo Berrío, en uso de sus atribuciones legales y mediante Decreto de Fundación, creó
a Pensilvania como una fracción del Distrito de Sonsón, dando
vida jurídica al municipio caldense que en el presente año celebró sus 150 Años
de Fundación.
Las
dos fechas anteriores no podían ser ignoradas por nuestra Academia Caldense de
Historia y es por ello que, en la presente edición de Impronta, se hará el
justo homenaje a estas dos poblaciones que hacen parte de nuestra geografía.
Respecto
a Risaralda, se incluyen los textos históricos: “Albania de emberas… de viento y de
caña”, Juliana Rojas Londoño, Licenciada en Ciencias Sociales y docente de la Institución Educativa Gabriel García
Márquez, en Risaralda, un estudio sobre el Resguardo Indígena La Albania.
“Yo
nací en Risaralda”, de Hernando Quiceno Grajales, donde relata la historia
cotidiana de la población del Occidente en los primeros
años, luego de su fundación.
“Civismo e Instituciones de
Risaralda en 100 años de Historia”, del Académico Germán Ocampo Correa,
compendio histórico sobre el Cuerpo de Bomberos, la Sociedad de Mejoras
Públicas, las emisoras locales, la Defensa Civil y el Grupo de Danzas
"Angaska".
Y “San Joaquín – Risaralda… 100 Años
de Vida Educativa”, de mi autoría, donde hago énfasis en la modernización del
proceso pedagógico actual y lo que la educación ha representado para el
desarrollo creciente del municipio.
Asimismo, se incluyen los Acuerdos de 1918 sobre creación de la plaza de mercado y
demarcación del área urbana de San Joaquín; como también dos Fotos del
Recuerdo.
En cuanto a Pensilvania, con su
ensayo “Pensilvania y el oriente de Caldas”, el académico Albeiro Valencia
Llano hace un recorrido historiográfico sobre su origen, desde las comunidades
aborígenes que habitaban el oriente caldense; la llegada de aventureros, exploradores
y agricultores que ampliaron las fronteras de Antioquia y Tolima desarrollando
el comercio y fundando pueblos; y el surgimiento de Pensilvania.
Lo anterior se complementa con los
artículos publicados en La Patria: “La Perla del Oriente con la que sueñan”, de Liset Espinoza; “Versiones de la
fundación de Pensilvania”; “El pueblo y sus gentes”; “José Néstor Valencia
Zuluaga, un hombre de fe en su pueblo” y “Pensilvania en la era digital, su
historia en facebook”; asimismo, Fotos
del recuerdo y el Programa de la celebración.
Por
otra parte, y acordes con la filosofía de nuestra Academia de estar al tanto
del acontecer histórico de la región, incluimos los textos sobre algunas
celebraciones aniversarias de municipios y corregimientos caldenses, a saber:
“San Félix celebra hoy 158 años de fundación”, del periodista Luis Fernando
Rodríguez; “El municipio de San José ya
es mayor de edad”, por Juan Emilio Agudelo; “Chinchiná cumple 156 Años”, de
Duván Zuluaga y Marquetalia celebra hoy 92 años como municipio de Caldas, de
Luis Ángel Giraldo.
Luego de los homenajes a las
poblaciones citadas, Impronta se centra en los ensayos históricos de distinta
índole, investigados y realizados por nuestros académicos, a saber:
“Herederos excluidos de la
colonización en Marquetalia”, de nuestro Presidente, Ángel María Ocampo
Cardona, donde amplía el número y los nombres de los fundadores de la población
del oriente, consagrados por la tradición histórica.
“Parroquia de San Lorenzo de Supía.
330 Años de Evangelización, 1685-2015”, estudio en el que Jorge Eliécer Zapata
Bonilla, analiza el origen y el papel pastoral de las parroquias de Nuestra
Señora del Carmen y la más antigua, la de Santa Ana en la vereda afro
colombiana de Guamal.
“Erupción del volcán nevado del Ruíz…
la tragedia de Armero”, de María Elvira Escobar Gutiérrez donde rememora esta
tragedia ocurrida en Armero, Tolima y parte de la de Villamaría y Chinchiná,
hace 30 años.
“Notas
en clave de sol para la historia de Manizales y de Caldas”, del Académico
Javier Sánchez Carmona, una síntesis de la vida musical en la región.
“Sergio Trujillo Magnenat, el
Artista Gráfico”, una breve reseña histórica de su vida y obra por el Académico
Fabio Ramírez Ramírez.
“Ministros manizaleños y caldenses a
través de la historia”, del Académico Vicente Fernán Arango Estrada, homenaje a
su obra y papel protagónico en la vida nacional.
“La Oculta Iluminada”, del
Académico y Consultor Internacional de nuestra Entidad, Pablo González Rodas,
Ph.D, Profesor Emérito de West Virginia University, un análisis de la novela La Oculta, de Héctor Abad Faciolince.
Y “El papel sellado y la moneda en
Colombia”, de Julián Chica Cardona, acercamiento histórico al proceso evolutivo
del papel sellado y la moneda en la economía colombiana.
En
Vida Académica, se hace un recuento de la actividad de la Entidad a lo largo
del segundo semestre de 2015 y primero del 2016, a saber: Entrega de la Orden “Emilio
Robledo Correa” al Periódico El Ansermeño; información de La Patria sobre la presentación de la revista Impronta, a la
Memoria de Otto Morales Benítez; comentario positivo sobre la publicación de
Jaime Lopera, Presidente de la Academia de Historia del Quindío, sobre la
misma; y presentación de Hojas de Historia – Segunda Época, publicación histórica
mensual sobre Risaralda, la Colina del Viento; Entrega de la Orden “Alejandro
Gutiérrez” al Académico Albeiro Valencia Llano, por parte del Señor Gobemador
de Caldas, Dr. Guido Echeveni Piedrahita. Nombramiento de nuestro Académico,
Carlos Arboleda González, como Miembro Correspondiente de la Academia
Colombiana de la Lengua. Y Encuentro de las Academias de Historia de Caldas y
Santander, en tomo a un Homenaje a la Memoria de Enrique Otero D’Costa.
En
las Reseñas del presente año, aparecen los libros publicados por los
académicos: Julián Chica Cardona, Dosquebradas – Industria y Región 1880 –
1980; Ángel María Ocampo Cardona, Paisajes inexplorados de la historia
caldense; José Miguel Alzate, Para
conocer a García Márquez; Gustavo Loaiza Loaiza, Poemas Viajeros & Recónditos; Jorge Eduardo Carvajal Ospina, Cartas a Pedro Petrá; Fabio Ramírez
Ramírez, La Casa de Dios es mi Casa.
Historia de la Sacrosanta Basílica Menor San Antonio de Padua de Manzanares;
Otto Morales Benítez, Eduardo Santos.
Apuntes para una biografía política; y Luis Ernesto Henao Buitrago, ABC. Tinta en el tintero. Historia de la
educación – Filadelfia 1840-1950, una muestra amplia de la actividad
investigativa y literaria realizada por los miembros de la Academia Caldense de
Historia.
Por último, en Autores Caldenses, se
incluyen los nuevos escritores que han publicado obras para enriquecer el
acervo literario de la región. Asimismo, una serie amplia de actividades que
han tenido que ver con los libros, la poesía, los autores fallecidos, la
gestión cultural desplegada por las entidades del gremio de la cultura y el
movimiento cultural a lo largo del año.
Impronta sigue avanzando en su
proceso de rescate, difusión y almacenamiento del quehacer histórico de la
región, para bien de los estudiosos y las nuevas generaciones que cuentan en
sus páginas, con la herramienta para conocer el pasado de pequeñas y grandes
realizaciones que siguen haciendo grande a nuestro Departamento.
***
Para terminar, no sobra agregar los
agradecimientos que son válidos y justos en este tipo de eventos y que en el
caso de la Academia, tienen un profundo sentido y una gran emoción. Empecemos:
Al
Dr. Guido Echeverri Piedrahita, Gobernador del Departamento, aliado
incondicional de la Academia Caldense de Historia y colaborador con la misma.
Al
Dr. Lindon Chavarriaga, Secretario de Cultura de Caldas, su espíritu sensible
por todas las manifestaciones de la cultura, hizo posible que volvamos a
entregar a los caldenses otra edición de Impronta que rescata parte de su
pasado.
A
la editorial Manigraf, a Jaime Alberto Galeano y a todos sus empleados, en
especial a Guillermo Panesso, quien fue clave en el proceso de diagramación de
la revista…
A
mis compañeros de la Academia, quienes me han brindado su apoyo en las empresas
editoriales que hemos emprendido… El trabajo mancomunado de nuestra entidad ha
hecho posible que lleguemos a las gentes, a los lectores e investigadores con
ensayos valiosos que encierran nuevas miradas en torno al pasado.
Y
a Ustedes, queridos acompañantes, que año tras año han seguido nuestro devenir
en las lides históricas y han disfrutado del producto literario de las mismas…
Muchas gracias por
su compañía.
Fabio Vélez Correa
Director
Secretaría
de Cultura de Caldas
Manizales,
octubre 14 de 2016