JORGE ELIÉCER ZAPATA
BONILLA. BASTIÓN DE LA IDENTIDAD CALDENSE
Ángel María Ocampo Cardona, el
Historiador de Marquetalia y actualmente Presidente de la Academia Caldense de
Historia, presenta en esta oportunidad su libro Jorge Eliécer Zapata Bonilla. Bastión de la Identidad Caldense, una obra donde quiere rescatar, destacar
y dar a conocer la vida y obra de uno de los intelectuales más importantes de
la región caldense, en los últimos años.
Como
historiador, Ángel María es autor de obras destacadas de la historiografía
regional como:
Marquetalia, su Historia y su Cultura, Monografía (1991), La Merced,
Historia y Cultura, Monografía (2002),
Cayetana: Una Exploración de Nuestras Raíces (2006), De la Doctrina a la Escuela. Una historia de la Educación en Manizales
y Caldas (2009), Posiblemente
ignorados (2010), Y bendijo Dios la
Villa del Sol: Vida y obra del Pbro. Antonio María Hincapié (2012), De Núñez a Marquetalia, La Villa del Sol,
la nueva monografía (2014) y Paisajes
inexplorados de la Historia Caldense (2015).
Obras
que brindan un perfil de lo que ha sido su verdadera pasión en las letras de
Caldas… el rescate y difusión de aquellos hechos y personajes que han marcado y
cimentado la historia del departamento en los últimos cien años y que
considera, con un juicio crítico acertado, que deben estar a la mano de los
nuevos lectores de la historia nacional.
El
libro está parcelado en 10 capítulos: Supía: pueblo de leyendas, música y miel.
Los latidos de la sangre. Formación del intelectual: sus preceptores.
Testimoniando la cultura de dos milenios. El contexto espiritual de la
juventud: movimiento cultural caldense en los años 60 y 70. Su gestión
creadora: centros y congresos de historia. La Academia Caldense de Historia. El
creador de bellezas literarias: perfiles. Lo que se ha dicho sobre su obra
intelectual. Y Jorge Eliécer: el ser humano.
En
ellos el autor hace un relato bien hilvanado de lo que ha sido la historia de
Supía, la población que vio nacer a Jorge Eliécer Zapata y que ha sido motivo
trascendente en su vida intelectual e investigativa. Asimismo, elabora un
recorrido analítico por sus ancestros, sus vidas, sus afanes y su papel
motivador para sus ansias de ser un escritor e investigador de la historia
regional.
Más
adelante, Ocampo Cardona se detiene en la vida y obra de los preceptores en su
formación de intelectual, los escritores: Otto Morales Benítez, Adel López
Gómez, Gilberto Garrido Cañarte, Juan Bautista Jaramillo Mesa, Humberto Jaramillo Ángel,
Antonio Álvarez Restrepo, el sacerdote historiador salamineño Guillermo Duque
Botero, Javier Ocampo López, Fernando Mejía Mejía, y Jesús González Barahona,
más conocido como Iván Cocherín.
Todos
ellos fueron sus amigos, con quienes compartió inquietudes literarias, afanes
intelectuales y correspondencia epistolar, mucha parte de ella, con conceptos,
opiniones e información sobre el quehacer literario de la región, años atrás.
Su visión (la de ellos), la lectura crítica de sus obras a publicar y sus
consejos nacidos de la experiencia, hicieron posible que la obra de Jorge
Eliécer surgiera con la fuerza y el valor del libro decantado, maduro para la
confrontación ante sus lectores.
Continuando
con el desarrollo del estudio biográfico, Ocampo Cardona hace un balance global
de los siglos XX y XXI en lo relacionado con su cultura, su vida cotidiana y su
ambiente político, haciendo énfasis en la época de los años 50 en adelante,
cuando nuevas juventudes crecieron a la vida cultural, generando un cambio
generacional y creando la nueva literatura y la nueva historia de Caldas.
Fue
por esa época cuando Jorge Eliécer Zapata Bonilla se adentra, con decisión y
dinamismo, por los vericuetos de la historia regional, empezando por escudriñar
los antecedentes y desarrollo de su tierra natal, la Vega de Supía, filón de
leyendas, de historias y de anécdotas entremezcladas de los tres grandes grupos
humanos que la conformaron, el indígena aborigen, el negro africano y el blanco
colonizador.
Escribe
entonces La Historia de Supía (1890),
un libro en que da a conocer, con base en fuentes primarias y la tradición
oral, lo que fue el origen, la evolución y la idiosincrasia del hombre de
Supía, jugueteando entre el afán libertario y anticlerical de la provincia
caucana, con el espíritu conservador y religioso del antioqueño raizal, con
ligeros matices de las costumbres negras arraigadas en Guamal y la ancestral
tradición del indígena de las montañas aledañas.
Esta
publicación, en sus años tempranos, marcó parte de su inclinación literaria,
porque ella originó el interés de Jorge Eliécer por seguir buscando en el
pasado, a través de los archivos, de los documentos y del diálogo con otros
historiadores. Y vinieron entonces las Efemérides
supieñas cronológicas (1990) y la publicación, más o menos periódica, de
“Supía Histórico”, una revista que contó mucho en la evolución de los estudios
de la historia regional para Caldas.
A
propósito, esta labor se complementó con los Congresos Departamentales de la
Historia, que organizó en Supía, donde varios historiadores tuvieron la
oportunidad de leer sus bien documentados textos sobre la historia de Caldas o
de sus municipios, en franca camaradería y valiosa confrontación ideológica…
Sin saberlo, se estaban sembrando las raíces para la futura conformación de la
Academia Caldense de Historia… Y en ello, el papel de Jorge Eliécer Zapata fue
crucial, al lado de Albeiro Valencia Llano, Carlos Arboleda González y otros
historiadores.
Todo
lo anterior es analizado con mirada crítica, por Ángel María Ocampo, a la vez
que el papel de Jorge Eliécer en otras áreas de la creatividad literaria: Como
Poeta, Investigador de la Historia, Biógrafo, Ensayista, Cuentista, Tallerista
literario, Reseñador, Prologuista y Crítico Literario. De cada una de estas
áreas, quedan impresas páginas y más páginas del autor biografiado, cada una de
ellas pequeños retazos de la nueva cultura literaria escrita que hace parte del
patrimonio regional.
Y
es que, incansable, productivo, cívico y motivador de grandes realizaciones,
Zapata Bonilla ha seguido con su ejercicio de la palabra, en su manejo
inmediato para escribir la crónica regional para La Patria, o en la notícula
breve de los aconteceres sociales o cívicos de sus gentes. Y en los momentos de
la concentración intelectual, en la elaboración de ensayos históricos o
literarios, que lo han llevado a ser un intelectual de la provincia, pero con
gran valor y consistencia en la vida cultural de la nación.
Por
último, no me queda más que felicitar a Ángel María Ocampo Cardona por su nuevo
libro, Jorge Eliécer Zapata Bonilla.
Bastión de la Identidad Caldense, un justo, valioso y oportuno homenaje a
un escritor que, al cabo de los años, está dejando una huella perenne para la
historia de la cultura regional y su legado para las generaciones futuras.
Fabio Vélez Correa
***
PRÓLOGO
Ángel María Ocampo Cardona
destacado investigador del Departamento de Caldas, se adentra ahora en el
perfil biográfico de un autor caldense, el del intelectual Jorge Eliécer Zapata
Bonilla, conocido en el Departamento de Caldas por su obra literaria e histórica
y también por su vocación de servicio desde el área de la cultura. Ocampo
Cardona, autor de esta biografía, viene realizando desde hace más de dos
décadas un trabajo silencioso con la historia. Con la misma discreción que
arropa a los grandes investigadores, va dando -cada cierto tiempo- nuevas
visiones de la tradición regional a través de sus libros.
Desde
sus inicios con la escritura de monografías, la primera la escribe sobre el
municipio donde nace, y la titula: Marquetalia,
su historia y su cultura (Imprenta Departamental de Caldas, 1991); sobre la
cual el mismo dice que “está escrita más desde la pasión que desde el rigor que
exige una obra de tamaña magnitud”,
hasta el día de hoy cuando de nuevo se adentra en la redacción de una
biografía como la que presenta sobre la vida y la obra de Zapata Bonilla y a la
que se refiere como “un tributo a uno de
los grandes creadores del Eje Cafetero en el siglo XX”, no ha hecho más que
dedicar horas y horas de su vida, que ya suman años y años de labor, a indagar
sobre los hombres y los hechos que han trazado las líneas del tiempo del
departamento.
Sin
la fragilidad de un texto escrito por un historiador en ciernes, sino con el
olfato desarrollado del “husmeador de cosas”, del “cuenta cosas”, como diría el
poeta Mario Rivero, el historiador Ángel María Ocampo Cardona presenta su
visión sobre el escritor supieño bajo el título de Jorge Eliécer Zapata Bonilla. Bastión de la identidad caldense, en
la cual presenta a este autor, del noroccidente de Caldas, desde tres grandes
puntos de vista: El primero de ellos hablará de pueblos y niñez. Conoceremos la
historia de Supía y el árbol de la vida del Jorge Eliécer. Raíces, anécdotas
como su expulsión por dos años de las aulas de clase, que causó el atraso de su
proceso educativo en el año 1966, cuando la ortodoxia académica imperaba en las
instituciones y en las mentes de los educadores, y alejaban de ellas a
adolescentes como Jorge.
Luego
se adentrará en la formación intelectual del personaje sobre el cual giran las
páginas de este libro y aquí la riqueza se compone de los nombres de altos
intelectuales como Otto Morales y Javier Ocampo, poetas legendarios como Juan
Bautista Jaramillo y Blanca Isaza, Gilberto Garrido, Fernando Mejía y
narradores totales como Adel López, todos amigos personales de Zapata Bonilla,
y muchos más que han de trazar el mapa literario que recorre Jorge Eliécer para
encontrar su tesoro personal: el de convertirse en un creador cuya pasión por
la historia complementará su formación. Para desarrollarla más tarde en el
capítulo sobre su creación literaria y su proyección como historiador de la
cultura regional.
Un
tercer punto de vista es el que proyecta el autor sobre Zapata cuando nos
devela la importancia del quehacer cultural del biografiado para el
Departamento de Caldas, es decir, Jorge Eliécer como fundador de revistas,
periódicos, encuentros, hasta llegar a la creación, el 15 de agosto de 2002, de
la Academia Caldense de Historia en el Municipio de Santa Ana de los Caballeros
de Anserma y de la cual fue su Presidente por varios períodos, sucesos que dan
muestra de la infatigable tarea del supieño más importante del siglo XX.
Este
libro logra un justo y serio acercamiento a la formación y producción
intelectual de un gestor y un creador inagotable, capaz de navegar entre la
escritura de poesía, cuento, ensayo, periodismo e investigación y la
convocatoria de eventos con la misma intensidad desde hace casi cuarenta años
sin desligar su pasión por la escritura y la lectura, de su fe en los nuevos
creadores. De la mano de Ángel María Ocampo Cardona, el historiador que conocí
a inicios de la década del dos mil en el municipio de La Merced, se recorre
parte de la memoria escrita de nuestro departamento a través de la vida de
Zapata Bonilla y al cerrar la última página del libro cada lector estará de
acuerdo que Jorge Eliécer es el Bastión de la Identidad Caldense.
Juan Carlos Acevedo Ramos